Papel o plástico
Si te encuentras en medio del debate plástico o papel cuando vas al súper a comprar, no creas que escoger bolsa de papel es la elección más ecológica. Quizá, a bote pronto y para quedar bien con los ecologistas, responderemos rápidamente que preferimos papel. No hay que estar tan seguros de qué es la respuesta correcta. Este es un tema al que antes de responder hay que conocer algunos factores. Empecemos por cómo los obtenemos. El papel se obtiene de los árboles ¿Cómo es el proceso del papel y del plástico? ¿Cuál consume más agua o contamina más?. En la producción de bolsas de papel se gastan muchos recursos, aunque posteriormente tienen más posibilidades de reciclarse o de romperse cuando llegan al vertedero.
La celulosa se obtiene a partir de papel reciclado y desechos de tela de fibras, etc. Desafortunadamente éstas no son suficientes así que también se obtiene de los árboles por lo que su impacto ambiental es grande. Por su parte, los plásticos son derivados del petróleo y éstos tienen ya su propio impacto ambiental. De acuerdo con Benjamín Ruiz Loyola, académico de la Facultad de Química de la UNAM se consume 40 por ciento menos energía que en la fabricación del papel. Es necesario saber además que en México ocurre el 4% de la deforestación mundial. La deforestación tiene como resultado la pérdida de a biodiversidad (que ya hablaremos de la biodiversidad la semana que entra) y las sequías.
Quizá la respuesta correcta ante la pregunta sea: Depende para qué. Hay evidentemente cosas que requieren del uso del papel y otras en las que el uso de plástico es mucho más eficiente. Digamos que compramos unas latas. Es mucho más eficiente llevarlas en una bolsa de plástico que pedir una de papel que no podrá sostener el peso. ¡Ah pero las bolsas de plástico son las grandes villanas! Benjamín Ruiz Loyola, académico de la Facultad de Química de la UNAM, considera que satanizamos al plástico cuando vemos que una de estas bolsas está en los océanos y acaba en la panza de una tortuga, delfín, etc. Sin embargo, es evidente que el problema no es de la bolsa, ya que no llegó sola hasta ese lugar, sino de los humanos que no dispusieron de ella como debían.
El meollo del asunto no está en el material sino en su utilización y el tratamiento que le damos. Vemos al plástico como un villano, pero el verdadero villano no es el plástico, sino el hecho que no lo reciclemos. De hecho, el plástico puede reciclarse hasta 20 veces y el papel solamente 8. El inconveniente es que, a escala mundial, se recicla alrededor de 20 por ciento del papel, y sólo cinco por ciento del plástico.
Ya sea papel, plástico, vidrio o aluminio, lo importante es reutilizarlo. Podemos usar las hojas de papel por los dos lados y después reciclarlas, reutilizar las bolsas de supermercado para guardar la basura. Acumular y las botellas de PET y aluminio para reciclarlas. Hay quienes recolectan el PET y han dado una nueva y artística vida, al convertirlo en muebles, basureros y demás objetos de ornato que pueden resistir las inclemencias del tiempo.
Si vamos de compras, lo ideal es comprar las bolsas reutilizables que pueden utilizarse en numerosas ocasiones o una canasta. Démosle una segunda oportunidad al plástico, no es tan malo como parece y ayuda a ahorrar agua y evitar que cortemos árboles. Eso sí la segunda oportunidad implica que lo reutilicemos y reciclemos.
Comparación entre papel y plástico
• Fabricar plástico consume 40% menos energía que fabricar papel, por lo que es menos contaminante.
• El plástico genera 80% menos residuos sólidos que el papel, por lo que ocupa menos espacio en los rellenos sanitarios.
• Solamente el 5% del plástico se recicla, mientras que en el papel se alcanza el 21% de reciclaje.
• El papel tarda menos en degradarse que el plástico.
• Un paquete de 1,000 bolsas de plástico tamaño estándar pesa aproximadamente 6.81 kg y tiene un grosor de 8.9 cm. Un paquete de 1,000 bolsas de papel con las mismas medidas pesa 63.56 kg y tiene un grosor de 116.84 cm. Por lo tanto, transportar bolsas de plático exige menos combustible y genera menos contaminación.
• El papel se puede reciclar, para lo que se requiere agua limpia, productos químicos para blanqueo y manejo de fibras, energía para calentar y volver a obtener pulpa y papel. El papel se puede reciclar en promedio ocho veces antes de que las fibras se vuelvan demasiado cortas.
• El plástico se puede reciclar empleando energía para fundirlo y volver a formar materia prima o productos terminados. El consumo de agua y de productos químicos en este proceso es mínimo. El plástico se puede reciclar más de 20 veces antes de volverse débil y quebradizo.