Es difícil entender que todo empezó como un ejercicio de lectura musical de unos cantantes aburridos de la monotonía profesional en la que vivían los intérpretes de coros durante los años sesenta. Ocho cantantes de jazz que vivían en París, se abrieron camino a través del repertorio para piano de Bach al descubrir el swing natural de esas piezas musicales. Sin cambiar ni una nota de la partitura original, adaptaron la música para voz, añadiendo ritmo y convencieron a Philips Records para poder grabar unos sencillos para amigos y familiares como regalo de Navidad. Lo que no sabían es el nivel de fama que este disco conseguiría: Jazz Sébastien Bach alcanzó el número uno en muchas listas de éxitos y ganó varios premios Grammy.
Hoy en día, hay pocos amantes de la música que no hayan oído el nombre Swingle Singers. Desde el lanzamiento del álbum revolucionario en 1963, este grupo de ocho voces virtuosas (con su propia sección rítmica vocal), ha actuado en los escenarios más famosos del mundo, manteniendo durante más de cuatro décadas un altísimo nivel de popularidad, más allá de la los sueños de su fundador el estadounidense Ward Swingle. Actualmente y con sede en Londres, el grupo cuenta con un grupo de cantantes jóvenes y con mucho talento, reencarnación de los Swingles originales (Ward Swingle cariñosamente se refiere a ellos como sus «nietos»). Ellos representan la encarnación moderna de un conjunto cuya música ha evolucionado y ampliado para abarcar estilos que van mucho más allá del estilo barroco con el que empezaron, el “ba da va” que los hizo famosos en la década de los años sesenta y que el público oye habitualmente en un homenaje al grupo francés original. Junto con el repertorio, el espectáculo también ha crecido hasta convertirse en un verdadero espectáculo de luces y coreografía. Lo verdaderamente bello es que aunque el grupo haya cambiado, el sonido sigue siendo sin lugar a dudas el de los Swingle Singers, el mismo sonido que cautivó a todo el mundo hace muchos años.
Los Swingle Singers ofrecen una gran variedad de espectáculos, desde el programa a capella titulado «Snapshots» a ópera contemporánea con visos orquestales. Esta capacidad de adaptación a un gran espectro musical se ha traducido en muchas colaboraciones con otros artistas. El fallecido Luciano Berio fue uno de los primeros compositores que reconocieron en el sonido una oportunidad para explorar la combinación de voces e instrumentos acústicos amplificados. Entre los compositores más recientes que han escrito para el grupo podemos destacar a la leyenda del jazz británico John Dankworth, a Michael Nyman, al compositor francés Pascal Zavaro, y al protegido de Berio, Azio Corghi.
Los elementos del grupo hoy día son:
Joanna Goldsmith-Eteson , Sara Brimer – sopranos
Clare Wheeler – contralto
Oliver Griffiths, Christopher Jay – tenores
Kevin Fox – barítono / percusión vocal
Tobias Hug – bajo /percusión vocal
Hugh Walker – ingeniero de sonido